A pesar de la larga distancia que muchos pasajeros deben recorrer, Nueva Zelanda es un destino de viaje muy popular. La isla está poco habitada, lo que hace posible que numerosas zonas naturales permanezcan intactas. Nueva Zelanda es, así pues, un destino de viaje ideal para unas vacaciones en plena naturaleza.

Además de sus numerosas zonas naturales intactas, Nueva Zelanda alberga también otras atracciones interesantes, como las ciudades de Queensland, Rotorua y Auckland. Siga leyendo para descubrir la historia, la cultura y las principales atracciones turísticas de Nueva Zelanda.


Datos y cifras

Capital Wellington
Lengua Inglés, Maorí
Superficie 268 021 km²
Población 5,1 millones (2021)
Religión Cristianismo (56%), hinduísmo (2,7%), budismo (1,1%), islam (1,3%), ateísmo (48,6%)
Moneda Dolar neozelandés (NZD)
Diferencia horaria 10 horas (en verano) o 12 horas (en invierno)
Duración del viaje Aproximadamente 22 horas
Enchufe Tipo I (es necesario un adaptador)
Agua corriente Potable
Visado Visado (NZeTA) obligatorio

Mapa de Nueva Zelanda

Nueva Zelanda está situada en el Océano Pacífico y tiene una superficie de unos 270 000 kilómetros cuadrados. El país está poco poblado, ya que tiene una población total de tan solo 5 millones de habitantes. Es igualmente uno de los países más aislados del pundo. El país más cercano, Australia, se encuentra a unos 2 000 kilómetros. Esta distancia es similar a la que separa Madrid de Atenas. Las dos islas más importantes de Nueva Zelanda son la Isla del Norte y la Isla del Sur. Alrededor del 80 % de la población neozelandesa vive en la Isla del Norte.


Historia de Nueva Zelanda

Los primeros habitantes
Con toda probabilidad, el ser humano está presente en Nueva Zelanda tan solo desde finales del siglo XIII. Los primeros en llegar a las costas de la Isla Norte fueron los Polinesios, una población originaria de los actuales Indonesia y Taiwan. Gracias a unas embarcaciones especiales, los polinesios pudieron establecerse por todo el Océano Pacífico. Durante varios siglos, los descendientes de aquellos viajeros polinesios se instalaron en las islas del norte y del sur.

Sus descendientes son los actuales Maoríes, término que en la lengua maorí significa «normal». Los maories eran cazadores y recolectores. Su presa favorita era el moa, un pájaro incapaz de volar, cuyos especímenes podían alcanzar hasta los tres metros de altura. Antes de la llegada del hombre, varios miles (o incluso millones) de moas vivían en Nueva Zelanda. Sin embargo, su caza masiva provocó la rápida disminución del nombre de indivíduos y, tras algunos decenios, la especie se extinguió por completo. Como consecuencia de ello, los maorís debieron adaptarse y muchos de entre ellos empezaron a llevar una vida más sedentaria y a practicar la agricultura.

Primeros contactos con los europeos
El primer europeo en pisar Nueva Zelanda fue Abel Tasman, que llegó a la isla del sur en 1642. En Europa, la costa oeste de la actual Nueva Zelanda era considerada una de las extremidades de un gran continente, (Terra Australis). La expedición de Tasman tenía precisamente como objetivo comprobar dicha teoría.

La costa de la Isla del NorteLa larga costa de la Isla de Norte

Más tarde, en 1770, los Británicos hicieron una expedición a las dos islas, lo que supuso el inicio de la colonización del país. Al principio, los británicos que se instalaban en Nueva Zelanda venían principalmente de Australia, sobre todo para comerciar con las poblaciones locales, aunque también para establecer colonias dedicadas a la caza de ballenas. Gracias al comercio con los británicos, ciertas tribus maoríes consiguieron armas de fuego, que utilizaron para someter a otras tribus peor equipadas. Varios misionarios se instalaron también en Nueva Zelanda con el objetivo de convertir a sus habitantes. A mediados del siglo XIX, la mayoría de los maoríes ya era cristiano.

La toma del poder por parte de los Británicos
En 1839, Nueva Zelanda fue anexionada oficialmente por los Británicos, a lo que numerosas tribus maories opusieron resistencia. Entre los años 1840 y 1870, tuvieron lugar numerosos conflictos violentos que tuvieron como consecuencia final la derrota de los maoríes. Entretanto, los europeos presentes en Nueva Zelanda intentaban obtener más autonomía con respecto a la colonia y, 1853, el país fue dividido en seis provincias, cada una de ellas con representación propia. Aunque cada uno de esos gobiernos locales conservase un cierto grado de poder, se estableció igualmente una cámara nacional de representantes.

Los británicos compraron grandes extensiones de terreno a los maoríes y tuvieron así la ocasión de extender sus dominios. Debido a las numerosas batallas en las que los maoríes fueron derrotados, su poder político disminuyó cada vez más. En la década de 1860, una serie de diputados maoríes, obtuvieron un escaño en el parlamento neozelandés y los hombres maoríes fueron autorizados a votar por primera vez. Desafortunadamente, la autoridad que podían ejercer en su tierra natal era muy limitada.

El nacimiento de nueva identidad nacional
A finales del siglo XIX, Nueva Zelanda contaba con alrededor de medio millón de habitantes. Fue también en aquella época cuando se construyeron carreteras, puentes y ferrocarriles, lo que permitió el desarrollo del país en el plano económico. Tras la Primera Guerra Mundial, el sentimiento nacionalista empezó a desarrollarse por todo el país. Los neozelandeses habían luchado valientemente y se sentían por primera vez como un pueblo verdaderamente unido e independiente de los colonizadores británicos. Poco a poco, Nueva Zelanda empezó a tener su propia voz sobre su política nacional.

Aún así, los lazos con el imperio británico siguieron siendo fuertes, tal y como demostró la voluntad de Nueva Zelanda de luchar al lado de los aliados durante la Segunda Guerra Mundial. Durante la guerra, Nueva Zelanda se acercó a los Estados Unidos, ya que este fue el país que más la apoyó. A pesar de ello, la cercanía con el Reino Unido siguió siendo fuerte al menos hasta la década de 1970.

Durante ese periodo, en Nueva Zelanda se produjo una fuerte urbanización. Incluso los maoríes se desplazaron en masa hasta las zonas urbanas. Esos pueblos autóctonos fueron durante largo tiempo víctima de discriminaciones, ya que se les relegaba a los barrios desfavorecidos y sus salarios eran más bajos que los de los trabajadores europeos. En la década de 1960, una serie de movimientos de protesta trató de poner fin a esta discriminación, pero hubo que esperar hasta el final del siglo XX para que los maorís obtuviesen oficialmente la igualdad. Hoy en día, la cultura maorí está reconocida como un elemento fundamental de la identidad neozalandesa.


Cultura

La cultura neozelandesa tiene numerosos puntos en común con la cultura británica. Hasta la década de 1950, los Europeos todavía consideraban a los Neozelandeses como Británicos. La relación con los antiguos colonos es todavía parcialmente visible, por ejemplo en el mundo del deporte. En nueva Zelanda, el rugby y el cricket siguen siendo muy populares. Antes de cada partido de rugby, el equipo nacional neozelandés hace el haka, el baile tradicional maorí. Eso muestra la gran influencia que ejerce todavía la cultura maorí indígena.

Los maorís solo representan el 15 % de la población actual de Nueva Zelanda. A principios del siglo XX, se temía que los maorís pudiesen desaparecer por completo, junto con su lengua y su cultura. Gracias también a la educación en lengua maorí (también llamada Te reo Māori), ese riesgo ha desparecido, afortunadamente. Hoy en día, esta lengua es hablada por aproximadamente el 4 % de la población neozelandesa.

AucklandEl horizonte de Auckland, la ciudad más importante de Nueva Zelanda


Clima de Nueva Zelanda

El clima de Nueva Zelanda es en general templado. Sin embargo, las cordilleras que atraviesan la Isla del Sur favorecen la existencia de un clima variado. La costa oeste de la Isla del Sur es la parte más húmeda del país, mientras que la costa este tiene pocas precipitaciones. Nueva Zelanda disfruta normalmente inviernos templados con temperaturas comprendidas entre los 10 y los 15 grados, y veranos relativamente frescos, con temperaturas entre los 20 y los 30 grados. Los turistas europeos aprecian particularmente el clima veraniego de Nueva Zelanda (durante los meses de diciembre, enero y febrero), que les permite escapar temporalmente al invierno europeo que suele ser más frío.

Mes Temperatura media máxima en °Cø max. temp. en °CTemperatura media mínima en °Cø min. temp. en °CMedia de días de lluviaø Días de lluvia
Enero 22 14 9
Febrero 23 14 8
Marzo 21 12 11
Abril 18 10 11
Mayo 16 7 14
Junio 14 5 14
Julio 13 3 15
Agosto 14 4 15
Septiembre 15 7 14
Octubre 17 9 13
Noviembre 19 11 12
Diciembre 21 13 12

AorakiCon sus 3 724 metros de altitud, el monte Cook es la montana más alta de Nueva Zelanda


Turismo Nueva Zelanda: parques nacionales

La popularidad de Nueva Zelanda se debe principalmente a la variedad y a la belleza de sus paisajes naturales. El país tiene 13 grandes parques nacionales, de los cuales varios ofrecen la posibilidad de acampar en plena naturaleza. Durante un viaje a Nueva Zelanda, muchos turistas deciden recorrer el país para poder admirar el mayor número de estas maravillas de la naturaleza. Estos son algunos de los parques naturales del país más hermosos.

Parque nacional de Tongariro
Este parque, situado en la Isla del Norte, es el más antiguo de Nueva Zelanda, y es particularmente famoso por su actividad volcánica. En el parque hay al menos tres volcanes activos, que contribuyen a la belleza impresionante del paisaje. Las rutas que se pueden hacer en este parque están entre las más espectaculares del mundo. Los senderos que recorren el parque este bordean dos montanaas y permiten admirar cráteres y lagos volcánicos de un azul único. Solo pueden acceder al parque un número máximo de visitantes al día. Si desea visitar este magnífico espacio natural, es recomendable que planifique su visita con antelación.

Parque nacional Abel Tasman
Con una superficie de 225 km², este es el parque nacional más pequeño de Nueva Zelanda. Está situado en la costa norte de la Isla del Sur, y sus playas son las más bellas de todo el país. Suele decirse que el Abel Tasman posee el mejor clima de Nueva Zelanda. No hace ni demasiado calor ni demasiado frío. Las temperaturas estivales oscilan alrededor de los veinte grados y en invierno no bajan de los 10 grados. Además de un gran número de rutas, este parque propone igualmente a sus visitantes la posibilidad de practicar deportes acuáticos, como el kayak, el submarinismo o la natación.

Parque nacional de los lagos Nelson
Este parque, situado en la Isla del Sur, debe su nombre a dos grandes lagos, el lago Rotoiti y el lago Rotoroa. Estos lagos de origen glaciar están rodeados de montañas y de densos bosques de hayas. El parque alberga igualmente varias especies indígenas de animales, como el famoso kiwi, símbolo nacional de Nueva Zelanda.

Parque Nacional de Arthur Pass
El parque nacional de Arthur Pass está situado en los Alpes neozelandeses, una cadena de montañas de unos 650 km de longitud que atraviesa la Isla del Sur de arriba abajo. Una gran parte de estas montañas está cubierta de densos bosques y valles en los que serpentean ríos y otros pequeños cursos de agua. Aquí, los turistas pueden hacer rutas a lo largo de una multitud de senderos, además de practicar actividades más temerarias, como la escalada o el esquí.

Parque nacional de Fiordland
El parque nacional de Fiordland, con sus 12 607 km², es la mayor reserva natural de todo el país y fue declarado patrimonio mundial de la UNESCO en 1986. Cuenta con numerosos cañones y fiordos, formados tras la desaparición de los glaciares hace millares de anos. EL fiordo de Milford Sound, famoso mundialmente, se encuentra igualmente en este parque natural. Una excursión en barco a través de uno o vario de estos fiordos es la ocasión ideal para admirar los magníficos panoramas que ofrece Fiordland.

La costa neozelandesaLa costa neozelandesa


Economía y moneda de Nueva Zelanda

La economía neozelandesa se basa principalmente en el sector terciario, pero los sectores agrícolas e industriales son igualmente muy importantes. Los productos más exportados son los lácteos, la carne, la madera y el vino. Los principales socios comerciales de Nueva Zelanda son Australia, Estados Unidos y China.

La moneda utilizada en Nueva Zelanda es el dolar neozelandés. Con una tarjeta bancaria europea, es posible retirar dinero en todos los cajeros automáticos. Es de todos modos importante que dicha tarjeta esté autorizada para ser utilizada en todo el mundo, y no solo en Europa. En las grandes ciudades, encontrará cajeros automáticos sin ningún problema, pero en los lugares más alejados, quizás no sea tan fácil retirar dinero. Por este motivo, es recomendable tener siempre encima suficiente dinero en efectivo.


Seguridad

Nueva Zelanda es un destino muy seguro. Aún así, siempre puede haber riesgos, sobre todo en las zonas más aisladas. En el país se producen corrimientos de tierra y terremotos, y durante los meses de verano, las tormentas tropicales pueden causar fuertes precipitaciones e inundaciones. Por otra parte, Nueva Zelanda tiene un cierto número de volcanes activos que pueden entrar en erupción de forma repentina. Manténgase al corriente de las noticias locales y de las reglas de seguridad anunciadas por el gobierno neozelandés.


Visado Nueva Zelanda (NZeTA)

Para poder entrar en Nueva Zelanda, usted debe estar en posesión de un visado o de una NZeTA. Si reúne las condiciones necesarias y es usted nacional de un país miembro de la UE, el Reino Unido o Suiza, puede solicitar una NZeTA, una autorización de viaje digital disponible online en este sitio web. El precio es de 64,95 € por persona, y la solicitud no le llevará más de 10 minutos. Con una NZeTA válida, podrá permanecer en Nueva Zelanda durante 3 meses consecutivos.

Solicite ya una NZeTA para Nueva Zelanda

e-Visado.es es una agencia de visados comercial y profesional que ayuda a los viajeros a obtener, entre otros, el visado para Nueva Zelanda. e-Visado.es actúa como intermediario y no forma parte de ningún gobierno. Es también posible solicitar el visado directamente ante las autoridades de inmigración (58 NZD por visado, a través de nzeta.immigration.govt.nz). Sin embargo, no podrá contar con asistencia en español. Si hace su solicitud con e-Visado.es, nuestro servicio de atención al cliente estará a su disposición 24 horas al día, 7 días a la semana. Además, revisamos manualmente su solicitud, así como todos los documentos presentados antes de enviarlos en su nombre a las autoridades de inmigración. Si sospechamos que su solicitud presenta errores u omisiones, nos pondremos personalmente en contacto con usted lo antes posible, para asegurarnos de que, a pesar de ello, su solicitud pueda ser procesada rápida y correctamente. Para hacer uso de nuestros servicios, usted paga 58 NZD en costes consulares, que nosotros abonamos en su nombre al servicio de inmigración, así como 32,77 €, IVA incluido, por gastos de gestión, como remuneración por nuestra mediación. Nuestros servicios han evitado grandes problemas a muchos viajeros durante sus viajes. Si, a pesar de nuestra asistencia y servicio de verificación, su solicitud es rechazada, le reembolsaremos la totalidad del importe de su compra (a menos que otra solicitud de visado Nueva Zelanda ya haya sido rechazada anteriormente). Obtenga más información sobre nuestros servicios.